Juntas de colector de escape requieren rebordeados de metal donde el gas pasa a temperaturas muy altas y a baja presión. Estos rebordeados de metal siempre se ven reforzados con láminas de metal para resistir el movimiento de los componentes que resulta de las grandes fluctuaciones de temperatura. Las modernas junta de colector de escape están fabricadas de acero de múltiples capas (MLS) sin recubrimiento. El número de capas de chapa metálica depende de la distorsión del colector de escape y de los componentes de la culata. Las fugas en el colector de escape producen malos valores de escape, la pérdida de potencia y un mayor consumo de combustible.